¿Qué desafíos éticos plantea el uso de la inteligencia artificial? La formación de los colaboradores en torno a esta tecnología no sólo demanda un desarrollo de habilidades técnicas, engloba aspectos como el uso responsable o la colaboración entre equipos.

La inteligencia artificial (IA) ya está presente en nuestras vidas y su acelerado desarrollo en los últimos años confirma lo rápido que avanza la Cuarta Revolución Industrial. El mundo del trabajo no es ajeno a esta realidad, lo que plantea un desafío importante: preparar a la fuerza laboral para aprovechar al máximo el potencial de esta tecnología.

De acuerdo con Accenture, el desarrollo de talento para un entorno de trabajo automatizado implicará la formación de perfiles especializados, como ingenieros en IA, pero también apoyar a la fuerza laboral actual para trabajar de forma eficaz con estos sistemas.

Sin embargo, la formación de capital humano para una economía más digitalizada no sólo dependerá del desarrollo de habilidades técnicas y perfiles digitales. Christy Pambianchi, vicepresidente ejecutivo de Recursos Humanos de Intel, afirma que una de las claves para conformar la fuerza laboral del futuro será preparar a las personas para colaborar con la IA.

“Prepararse para el futuro de la IA requiere una capacitación técnica, pero no es lo único que se necesitará. La formación de trabajadores no técnicos sobre cómo colaborar con la IA como copiloto y ser pensadores críticos y constructores de sus resultados será igual de vital”, afirma el ejecutivo en un artículo para el Foro Económico Mundial.

El “Informe global de tendencias de aprendizaje y habilidades 2024” de Udemy Business destaca que el avance de la tecnología no sólo generará una mayor demanda de competencias digitales, pues las habilidades vinculadas con el liderazgo serán también requeridas en un contexto más digitalizado, especialmente por los cambios en modelos de trabajo o la colaboración entre equipos.

De esta manera, ante un escenario que plantea no sólo el desarrollo de nuevas habilidades como algo urgente, Christy Pambianchi destaca al menos cuatro principios que serán fundamentales para preparar a la fuerza laboral ante el avance de la IA:

1. Uso responsable

La inteligencia artificial es una herramienta que puede ayudar a resolver grandes problemas, pero su aplicación inclusiva y transparente depende de que cada empresa tenga claridad en las implicaciones éticas en cada aplicación de la tecnología.

De acuerdo con la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE), la ética en el desarrollo de la inteligencia artificial es una de las asignaturas pendientes. Sólo el 1% de las vacantes en el mundo relacionadas con esta tecnología mencionan “IA ética” o “IA responsable” entre los requisitos.

2. Mecanismos de colaboración

La inteligencia artificial puede ser aplicable en todos los departamentos de una compañía, eso implica que en una empresa puede haber varios equipos explorando cómo usar esta tecnología para alcanzar los objetivos del negocio. La colaboración entre las áreas para priorizar estrategias y recursos será un aspecto importante.

“Imagine, por ejemplo, que su equipo de marketing quiere aprovechar la IA para recomendaciones personalizadas de productos y publicidad en redes sociales, mientras que su equipo de ventas está entusiasmado con el uso de la IA en chatbots para atender mejor a los clientes y cualificar a los clientes potenciales. Hacer que estos dos equipos trabajen juntos en una o dos soluciones de IA potentes, que atiendan las necesidades de varios departamentos, será más eficaz y eficiente que los equipos que generan por separado docenas de proyectos de IA en silos”, expone Christy Pambianchi.

3. Pensamiento crítico

La inteligencia artificial no resolverá por sí sola los retos de negocio, las preguntas correctas y cómo evaluar las respuestas de la tecnología serán tareas para las personas en un ambiente digital.

“El desarrollo de las habilidades analíticas y de resolución de problemas de los empleados les capacitará a la hora de guiar, formar y diseñar soluciones de IA que ahorren tiempo y sirvan como compañeros de trabajo digitales de confianza”, afirma el ejecutivo de Intel.

4. Escenario de prueba y error

El potencial de la IA en el mundo del trabajo sólo se podrá explotar con equipos de trabajo experimentando las funcionalidades de estas herramientas en sus actividades. En este sentido, las culturas laborales con apertura al fracaso serán clave para preparar a la fuerza laboral en este nuevo entorno, siempre y cuando se alcancen lecciones adecuadas de cada error.

IA en el trabajo, el impacto será positivo

Pese a las disrupciones de la inteligencia artificial en el mundo del trabajo, la fuerza laboral a nivel global muestra optimismo en torno al impacto de esta tecnología en sus empleos. El 62% de los trabajadores afirma que estas herramientas tendrán un impacto positivo en su trabajo, de acuerdo con el “Global Workforce of the Future 2023” de Adecco Group.

El optimismo en torno a la IA en el trabajo que perciben las personas se vincula con beneficios como:

  • Ahorro de tiempo
  • Disminución de tareas repetitivas y enfoque en trabajo estratégico
  • Acceso a nuevos empleos

Aunque la mayoría de las expectativas son positivas, el informe subraya que la IA plantea retos para la fuerza laboral como un rezago en las habilidades, cambio de profesión o la pérdida del puesto de trabajo.

En ese sentido, la firma señala que “apoyar a las personas para que comprendan el impacto de la IA en sus roles individuales y brindarles orientación y planificación de la transición de carrera es clave para proteger la empleabilidad de las personas”.