Leonel Godoy informó sobre el debate a finales de abril de 2024 respecto a la iniciativa de reforma de la Ley Federal del Trabajo 

Han trascurrido meses de estar a la expectativa sobre la iniciativa de reforma a la Ley Federal del Trabajo (LFT) que busca la reducción de la semana laboral de 48 horas a 40 horas.

Esta reforma que busca el beneficio de millones de empleados del sector privado formal en la economía nacional, se ha atrasado varios meses debido a las próximas elecciones, y se espera que a finales del mes en curso sea debatida en la Cámara de Diputados.

Leonel Godoy, vicecoordinador de la bancada de Morena en la cámara baja del Congreso de la Unión, informó hace unas semanas que, la iniciativa de reforma para la reducción de la jornada laboral sería discutida por los diputados federales, junto con las distintas reformas constitucionales que fueron presentadas por el Presidente Andrés Manuel López Obrador en febrero de 2024.

Tras ser cuestionado respecto al debate de la reforma de la jornada laboral, el diputado morenista expresó que:

“No está contemplado, por el momento, que el tema pase ya al pleno de los 500 legisladores para su votación, porque será parte de los foros en los que se analizan las 20 reformas que envió el Presidente Andrés Manuel López Obrador”.

Es así, según el comunicado de Godoy, que, será después del próximo 20 de abril del 2024 en que la reforma en materia laboral se pondrá en discusión en el pleno de la cámara baja del Poder Legislativo Federal, añadiendo las consideraciones expuestas en el parlamento que tuvo lugar en octubre y noviembre del año pasado.

Cabe señalar que López Obrador había solicitado a senadores y diputados, poner en discusión las iniciativas de reforma a la LFT pasando las elecciones del 2 de junio, ya que considera que estas propuestas podrían ser utilizadas con fines electorales. 

Aunado a eso, es importante considerar que quedan pocos días para que finalice el periodo ordinario de sesiones de la actual legislatura, razón por la aumenta la probabilidad de que las reformas laborales y otras iniciativas no consigan la aprobación en el Congreso de la Unión, y, que estas sean pospuestas hasta que las cámaras se integren con los nuevos diputados y senadores electos en junio.